Fastidioso recuperado

Para los que no me conocen les hago saber que soy un fastidioso recuperado, luego de largo de autotratamiento. Mi enfermedad me ha llevado a perder muchos amigos, familiares, negocios y demás cosas, de las cuales de algunas me arrepiento y de otras no.
Pero como todo fastidioso recuperado, estoy susceptible a cualquier recaída y cada día que pasamos sin caer en nuestra enfermedad es un día ganado, donde logramos que los seres humanos que nos rodean no nos caigan tan antipáticos como en nuestros días aciágos.-
Pero sin entrar en un reparto de culpas, el mundo que me rodea en estos tiempos está haciendo lo imposible para que tenga nuevas recaídas, personas que contestan sin sentido, desubicados, entre otros. Por suerte mis métodos anti-fastidio en líneas generales están funcionando, en gran parte por la censura que ejerce mi conciencia sobre mis pensamientos.
Sin perjuicio de lo dicho, tendré que volver a los dosís más extremas de paciencia que mi cuerpo aguante, para seguir en esta tesitura de no contestar cada tontería que se me presenta a cada momento, para que cada incoherencia ante la que me enfrento no me consiga desequilibrar de manera absoluta y logre que mi enfermedad me haga añicos.-