jueves, 25 de junio de 2015

Despidiendo a un héroe!!!!

Los tiempos pasan sin tregua, sin perdonar las distracciones que nos apareja la vida. Y muchas veces nuestra personalidad que fuera exitosa en alguna oportunidad tienen que dar cabida a los nuevos tiempos que corren, a los noveles personajes que nos empiezan a acompañar hoy en día. Como diría Schumpeter, muchas veces nos encontramos ante un proceso de destrucción creadora, en el cual debemos aniquilar algunas aspectos, que pudieron ser buenos en distintas circunstancia, para permitir el nacimiento de lo novedoso. Y por supuesto, en todo nacimiento hay dolor para dar lugar a una alegría.
Nuestro amigo sabía que tenía que despedir al héroe que había sido, al que le había dado tantas alegrías, el que lo había sacado del ostracismo, el que lo había alejado de los que los querían mal, el que le había hecho perder la ingenuidad en el mundo que lo rodeaba, el que lo había convertido en ateo. Pero el tiempo había actuado como una criptonita que había disminuido a su héroe en una caricatura.
Durante años ralentizó su despedida, trataba que cuando fuera el momento pudiera hasta disfrutarlo, con honores, de pié.
Cree que lo logró, porque su despedida tiene que dar lugar cabida a nuevos intereses, a nuevos momentos sin viejas ataduras que le harán perder preciosos momentos del trayecto final de la vida que empieza a transitar.
Cree que lo logró, porque no es una despedida triste. Es una despedida. consensuada. Pactada. Sabían ambas que el final se avecinaba, hasta necesitaban que se produjera.
Su vieja y nueva personalidad se encontraron, hablaron entre si. La vieja socarronamente le dijo vos no hubieras existido sin mi. La nueva se lo agradeció y le respondió, nadie te recordará si yo no empiezo a existir. La vieja lo sabía, y como los antiguos pistoleros orgullosos de su pasado y que no están dispuestos a morir frente a ningún principiante, sin decirlo, le agradece a la nueva su aparición.

La vieja y nueva personalidad se funden en un abrazo. La nueva sabe que la vieja siempre volverá para algún homenaje, siempre brillará en alguna tertulia. También sabe que tiene que forjar una cataratas de éxitos que la vieja alcanzó. No le preocupa. Al fin y al cabo fracasar es dejar todo lo que tenemos y como siempre deja todo, nunca fracasara.

sábado, 20 de junio de 2015

Vintage 1: Lollipop (1958) de The Chordettes.

La “locura” en la década de los 50´desde el punto de vista musical fue Lollipop (1958) de The Chordettes. 
Un video para ver y analizar épocas.