Un nuevo hecho o fenómeno, al ser aprehendido y
endoproyectado, abrirá inexorablemente grietas, profundas o apenas perceptibles,
en nuestra edificación cognitiva; no a causa de que el fenómeno nuevo
incremente una suerte de depósito en el que la empiria se halla grabada como
imagen especular, sino por nuestra necesidad de elaborarlo, y de covertirlo en
concepto. La idea, de tal manera, no es una conclusión sino un comienzo, un
proyecto.
Fuente: Aportes a la estética dde Marta Zátonyi, página 14, Biblioteca de la mirada
No hay comentarios:
Publicar un comentario