Recientemente una señora mayor conocida de
la familia empezó a entregar sus cosas más preciadas a sus seres queridos más
cercano. No está enferma, tiene plena movilidad y capacidades mentales pero su
reloj biológico le indica que si se quiere perpetuarse en la memoria de sus
personas amadas debe comenzar a transferir esas reliquias para que las valoren
como ella lo hizo, y no se conviertan en un botín de guerra al tiempo de su muerte.
Y en estos tiempos en los que me hallo en
estado de melancolía, algunos podrían decir deprimido, pero prefiero obviar esta
palabra por hallarse demasiado bastardeada para reflejar cualquier estado de
ánimo, no podía encontrar lo que la motivaba.
Y, a raíz de este suceso de
desprendimiento de objetos apreciados por una persona, descubrí que el motivo de
la melancolía pasaba por no aceptar el paso del tiempo, de aceptar y entender
que estoy entrando en la última parte de la vida en la cual no hay revancha, en
la cual somos realidad o no somos nada. Ya no seré astronauta, ni jugador de
fútbol, ni Presidente de la Nación, simplemente una persona corriente que no le
ha ido mal teniendo en cuenta de donde proviene y a donde quería llegar.
Los hijos empiezan a escribir su propio camino,
y nos tortura comprender que no podremos seguir protegiéndolos ante un mundo
hostil que ineludiblemente les quitaran las ilusiones que tienen, como nos
sucedió a nosotros y como le sucederá con sus propios hijos.
Y ese dolor no es depresión, es el dolor
de una etapa que se termina hacia nuevos años que nos enfrentarán a nuevas
situaciones, a nuevas reflexiones. Y debemos ser optimistas, pensar en la
destrucción creativa de Schumpeter, lo viejo debe dar lugar a lo nuevo y el
dolor es porque por primera vez en la vida nos sentimos en la posición de lo
viejo, en dejar de ser los protagonistas principales para ser simples espectadores.
Llegaran tiempos en que debemos especular
más que emprender?....
Llegaran tiempos en que deberemos aprender
a reflexionar frente a una pradera mientras vemos como las nuevas generaciones
intentan proyectos utópicos sin convertirnos en los agoreros de turno??.....
El tema a comprender es que un espectador si
bien no es parte del espectáculo lo puede disfrutar, criticar y llevarnos a
nuevos horizontes que nos permitan transitar nuestra última etapa con una sabia
alegría…..